En tu día a día hay momentos alegres e inolvidables, pero también están los momentos tristes que marcan tú vida, esos que pasas con un trago amargo, esos que son difíciles de olvidar. Hay días que sientes que sacrificas todo para agradar a una persona, y que decepción tan grande es que no valoren lo que haces, como dice el profesor Rider Morillos " Hay que ser mansos, pero no mensos", es decir dar sin recibir nada a cambio, porque he notado que existen muchas personas que se aprovechan de ti, y cuando necesitas de su ayuda o una mano amiga te dan la espalda .
Si algo por lo que luchas constantemente y eres perseverante no da resultado, es mejor retirarse e intentar otras cosas, Dios todo lo puede, pero quizás esa situación por la que estas pasando no te conviene, porque el tiempo de Dios es perfecto y tal vez tiene mejores planes para ti.
No te ahogues en un vaso de agua, no dudes de la grandeza de tú Padre Celestial, seguramente eres uno de los que se ha hecho la famosa pregunta ¿Dios por qué a mí?, entiende que él quiere lo mejor para ti, no te sientas solo en tu lucha, recurre a la oración y todo marchará bien, recuerda que orar es hablar con Dios, así no lo veas, el siempre esta allí porque te ama... no hay nada más grande que su amor.
No te ahogues en un vaso de agua, no dudes de la grandeza de tú Padre Celestial, seguramente eres uno de los que se ha hecho la famosa pregunta ¿Dios por qué a mí?, entiende que él quiere lo mejor para ti, no te sientas solo en tu lucha, recurre a la oración y todo marchará bien, recuerda que orar es hablar con Dios, así no lo veas, el siempre esta allí porque te ama... no hay nada más grande que su amor.
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